viernes, 5 de febrero de 2016

INDECENTES INDULTOS FEMINISTAS


WE CAN DO IT!

¡PODEMOS HACERLO!

(Incumplir la ley)





El indecente indulto a la mujer María Salmerón, condenada a una ligera pena de prisión (que ya no cumplirá) por haber impedido sistemática e ilegalmente a lo largo de varios años las visitas de su hija a su ex marido, deja claro una vez más que en España los varones somos ciudadanos de segunda clase. Por cierto es el segundo indulto por este motivo.

Este vergonzoso episodio sirve para restregarnos en la cara a los varones, por enésima vez, que la mujer puede pasarse la ley y las sentencias judiciales por los ovarios. Aunque el hombre consiga algo (en raros casos) tras una batalla desigual contra una ley y una (in)justicia infectadas hasta la médula de odio contra el varón y totalmente parciales, ella puede ignorar la ley y las sentencias; si es que no hay más remedio que condenarla siempre puede llegar el indulto, y llega puntualmente tras la habitual, miserable campaña de manipulación y propaganda.

El mensaje está muy claro: quítate de en medio varón (pero sigue pagando la extorsión legalizada) porque no hay ni habrá justicia para ti.

Como en ocasiones anteriores y como es habitual en estos temas, abundan los artículos periodísticos totalmente parciales y repugnantes, obras maestras de descaro y deshonestidad cuyo único objeto es darle la razón a ella a toda costa; como siempre nos hablan del padre maltratador, el nuevo paria de nuestra sociedad, sin que jamás se precise en qué consistía el maltrato. 

Usando la palabra maltratador las víboras y sus despreciables juntaletras en los basurmedios de comunicación quieren que entendamos: violento, asesino en potencia, golpeador de mujeres; cuando en realidad puede ser simplemente (las leyes basura condenan por esto) quien ha dado un empujón a su esposa (aunque ella puede darle más y mejores bofetadas o golpes y no es maltratadora) o quien le ha levantado la voz (naturalmente ella puede hacerlo sin que haya maltrato).

O simplemente ella puede denunciar en falso y, debidamente asesorada por las despreciables abogaduchas de la mafia feminista, fácilmente conseguirá que el varón sea condenado; o como mínimo trastornar gravemente su vida y, si así su capricho lo desea, apartarlo de sus hijos.

En resumen, desde que existen las leyes basura del feminismo, decir maltratador no significa absolutamente nada; no significa una mierda, salvo que ha sido denunciado, o condenado por leyes que han escrito las feministas y tribunales de genero instituidos para perseguir al varón.

En este caso no sólo el nombre del padre no se dice, pues es una no-persona (es un "maltratador" y eso basta) y sus razones cuentan como un cero a la izquierda, sino que además se calla cuidadosamente el tipo de maltrato: esto significa con una probabilidad cercana al 100% que se trata de la patraña feminista del “maltrato psicológico”. Es decir el puro arbitrio de la mujer que llama maltrato a cualquier cosa, porque sabe que una sociedad de castrados mentales con el cerebro podrido por el feminismo le dará la razón.

Pues si efectivamente hay situaciones humillantes, si hay hombres que le hacen la vida imposible a la mujer, muchísimo más frecuente es el caso opuesto. Pero una mujer que humilla a su marido y le hace la vida imposible jamás será condenada por maltrato psicológico porque este tipo de “maltrato” no es más que un delito cortado a medida para la justicia bolchevique feminista.

Sí he encontrado un artículo sobre una aparición de la mujer en televisión donde decía: “No me olvidaré cómo me llamaba inútil y me decía que nunca conseguiría llegar a ascender en el trabajo”. Si lo más violento que puede echarle en cara es que la llamaba inútil… además no se sabe lo que ella le decía a él. Ni podemos saberlo, ni en realidad la justicia debería entrar en tales cosas; pero durante un tiempo el hombre tuvo la  custodia de la niña y luego se la dieron a la madre, de modo que seguramente un monstruo violento no era, o no había dado ningún motivo para pensarlo.

No faltan tampoco artículos de los juntaletras que nos hablan de acoso por parte del marido de esta mujer: el acoso consistía en que el hombre la denunciaba (como era su derecho) cuando ella incumplía el régimen de visitas establecido por el juez.

¿Es acoso recurrir a la ley para obtener justicia? Por lo visto sí, cuando lo hace un varón.

Apenas podemos contener la náusea cuando leemos cosas así.

Los episodios como éste confirman que vivimos en un ambiente envenenado donde la mujer tiene siempre razón por defecto, donde la política y la justicia de doblegan ante la presión de la opinión pública y de los medios.

Una situación por desgracia lógica y comprensible, pues decenios de profundo condicionamiento mental han creado, como nos dicen los juntaletras, un cierto clima social ... el clima social consiste, hablando claro, en haber convertido a la mayor parte de la población y a muchos, muchísimos entre las élites (dicho con sarcasmo, se entiende) en borregos mentalmente secuestrados, con los cerebros llenos hasta rebosar de la inmundicia que las feministas les han vertido dentro.

MAX ROMANO

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno el texto de la entrada, completamente de acuerdo, pero no se puede esperar otra cosa de una sociedad repleta de gente castrada mentalmente, adoctrinada una parte por el sistema educativo y otro grueso muy importante por los mass media(O "mass mierda" como dicen algunos), mucha gente no es capaz de pensar por sí misma, pero no sólo en este tema, este es el problema, es una pena, pero es así.

Anónimo dijo...

Muy acertado como siempre.
Y si el lobby feminista es repugnante, no lo es menos el lobby gay.
En estos días asistimos al caso de los Maristas de Barcelona con abuso de menores en el que se ha dejado libre y sin cargos al pedófilo confeso. Al oír la noticia no daba crédito, pero al momento pensé en esa estadística que dice que un gran porcentaje de pedófilos son al mismo tiempo maricones. Y efectivamente, aunque como siempre se aplica un tupido velo por parte de los mierderos de siempre, en algunos medios a salido a la luz que el tipo es efectivamente maricón, y de ahí supongo que su liberación inmediata.
Que asco y que impotencia.

Anónimo dijo...

Como siempre poniendo el dedo en la llaga. Mostrando con honestidad y valor la catastrofica situacion social los que somos, sin avergonzarnos por ello, de ser HOMBRES.Nos pones un bochornoso ejemplo, pero podrian añadirse miles. El acoso al que estamos sometidos por los sectores mas execrables del entorno social, esta llegando al limite de lo soportable. Mi pregunta es: que podemos hacer para defendernos sin claudicar?

Por cierto, conoces una web llamada Circulo Atenea. Se definen como una asociacion de mujeres contra el feminismo hembrista. Te suena.

Un saludo LEG

Anónimo dijo...

A LEG, sobre lo de Circulo Atenea:

http://circuloatenea.com/2013/06/29/la-mujer-celta/

En este link hacen apología de las mujeres destripadoras y decapitadoras de hombres. Citan que "Plutarco, en su tratado de virtudes femeninas, cuenta varias anécdotas sobre mujeres celtas. Una mujer celta de nombre Kinimara al informarle a su marido que había sido atropellada y violada por un extraño, le presentó al mismo tiempo la cabeza del ofensor."

Como podemos notar, las fantasías sobre mujeres pegapatadas no son un vicio actual, sino que se remontan a tiempos inmemoriales.

Recuerdo que también tenían otro artículo en defensa de las mujeres musculosas. Después de leer cosas semejantes uno queda CURADO PARA SIEMPRE y no vuelve jamás.