Aunque
la noticia es de hace más de un mes, encuentro tiempo ahora para dedicarle una
entrada al caso del juez Serrano. Los lectores de este blog conocen ya el caso
de este juez, perseguido por la lobby feminista
por sus críticas a las leyes inicuas contra el varón implantadas en España y en
general al condicionamiento de la justicia por las imposiciones feministas, que
han llevado a una práctica judicial ideológica, sectaria y antimasculina por
principio. En una palabra, por intentar impartir justicia de manera correcta e
imparcial, y no sistemáticamente en contra del varón.
Como
le tenían muchas ganas, finalmente consiguieron encontrar el pretexto para quitarle
de en medio, acusándole de prevaricación por haber extendido en una situación
puntual por un día el régimen de visitas de un niño con su padre. Por haber
cometido esta falta se solicitó su inhabilitación como juez. En un país donde
toda clase de gentuza circula libremente y goza de la mayor indulgencia puede
parecer curioso este rigor, pero al contrario es totalmente lógico: en toda
tiranía que se precie los criminales comunes son tratados con mayor indulgencia
que los criminales políticos, y crimen ideológico es hoy en día oponerse a la
ideología de género y al feminismo como ha hecho el juez Serrano. La entrada
del blog en que se hablaba de su caso fue publicada el año pasado:
Ahora
la canalla se ha salido con la suya y han alcanzado el objetivo tenazmente
perseguido: tras haber sido absuelto por dos tribunales, el Tribunal Supremo le
ha condenado a diez años de inhabilitación, lo cual supone en la práctica su
expulsión de la carrrera judicial. Para más detalles se puede ver el enlace del
blog Tendencias
Feminazis dedicado al tema:
Alguna noticia sobre el caso:
El
juez Serrano recurrirá al Tribunal Constitucional y al de Estrasburgo para
agotar todos los recursos posibles contra este atropello, pero seguramente es
consciente de sus escasas posibilidades. El TC está tan infectado y dominado
por la secta feminista como la justicia ordinaria; baste recordar que no
consideró contrario a la Constitución esa basura que es la Ley de Violencia de
Género, diseñada para castigar al varón que explícitamente viola el principio
de igualdad por sexo establecido y con el cual se llenan la boca
las feministas cuando les conviene. Sobre la justicia de Estrasburgo, es también
dudoso que sirva para algo, pues todas estas instituciones están dominadas por
la corrección política.
Este
es uno de los resultados en nuestro país del miserable período de Zapatero, el
enemigo del varón, el tonto útil que ha llevado la dictadura feminista en
España a niveles de fanatismo inconcebibles, en particular en el campo de la Justicia
como desgraciadamente estamos viendo. El mensaje es transparente: a quien se atreva
a levantar la cabeza se la cortan, no se admiten críticas a los abusos de la
secta.
El
juez Serrano desde ahora pasará a ejercer la abogacía. Le daremos la palabra:
“Prefiero ser un
abogado libre a un juez esclavo del miedo y la presión política”.
“El interés y
motivo que realmente subyace en este procedimiento, ante su absurdo,
incoherencia y desproporción, ha sido desde el principio el de pretender
expulsarme de la carrera judicial por ser un juez molesto al lobby de género”
"Ese lobby ya
anunció que pedirían al Consejo mi expulsión de la carrera judicial por mi
parcialidad en el ejercicio profesional, y que estudiarían si presentaban una
denuncia por prevaricación".
El
día siguiente a este anuncio hubo una rueda de prensa en la que la vocal del
CGPJ y presidenta del Observatorio de Violencia de Género hizo
"unas
declaraciones en las que advertía de las posibles responsabilidades en que
podría haber incurrido por las críticas a la ideología de género y advirtiera
de los efectos perversos que estaba produciendo la Ley de Violencia, incluso en
contra de las mujeres maltratadas".
Ciertamente
estas cosas no constituyen ninguna sorpresa para el autor de este blog, que las
lleva escribiendo desde hace bastante, pero naturalmente tienen un peso muy distinto
dichas por este profesional, un juez que conoce desde dentro la situación y además
ha pagado un alto precio por su rectitud.
Entre
tantos payasos, cobardes, lameovarios
y gilipollas domesticados, un hombre que ha elegido mantenerse de pie y no agachar
la cabeza, atrayendo sobre sí el odio de la jauría feminista.
Las
implicaciones de este episodio son claras, la advertencia para los demás
magistrados inequívoca: los jueces que se quedan, los que van a tener una vida
tranquila, los que llegan al final de su carrera y -por tanto- los que nos van
a juzgar llegado el caso, en definitiva a los que se permite impartir justicia
en nuestro país, o están a favor de la ideología feminista o, si no lo están,
están condenados a ser “esclavos del miedo
y la presión política”. Es decir que lo que imparten es (in)justicia antimasculina, bien por convicción, bien por miedo y presiones políticas. El resultado al
final es el mismo.
Esta
es la justicia que tenemos, esta es la justicia de la sociedad feminista y esta
es la sociedad antipaterna en que vivimos.
1 comentario:
Buen texto, refleja claramente la sinrazón del sistema que nos rige y que sólo fomenta represión e injusticias, el ejemplo de este juez lo demuestra, una persona que quiere impartir justicia, sin favoritismos y es acusado por las mismas y los mismos también(porque también los hay) que viven del llamado lobby feminista, a base de subvenciones fomentan lo contranatural, previa orden de los poderes mundialistas.
Obviamente todo esto es antidemocrático, por ese mismo motivo los medios de Desinformación no hablan del tema, porque saben que cualquier persona en su sano juicio se llevaría las manos a la cabeza ante tal aberración.
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