Ya
me ocupé en la entrada Paternidad
criminal y mentiras feministas del tema de los padres que asesinan a sus
hijos, de cómo la secta feminista utiliza estos sucesos para vomitar su bilis
contra el varón y el padre en particular:
También
me he ocupado de la Semana del Odio en la que, alrededor del Día contra la violencia machista, la
avalancha de propaganda antimasculina alcanza el paroxismo. La entrada se llamaba
El día del odio antimasculino y, por
cierto, la he aprovechado adaptándola un poco para el libro Exiliados del Sistema del que hablé en
la entrada anterior:
Este
año hemos tenido, como siempre, esta Semana del Odio en el mes de noviembre;
aunque en tono menor respecto a cuando estaba como presidente el Enemigo del
Varón, no ha faltado la ración de propaganda y falsificación de la realidad, ni
las campañas tendenciosas para solicitar nuevas leyes antimasculinas y criminalizar
más comportamientos de los varones.
Lo
vemos por ejemplo en la publicidad dada al vídeo de una mujer que recibía
piropos por la calle, con la inevitable denuncia del piropo como “maltrato” y la evidente intención de
aprobar, antes o después, leyes basura para perseguir penalmente los piropos.
Piropos
que pueden ser bienvenidos o no, groseros o no, pero es una esfera en la que no
debería intervenir la ley y ser dejada al campo de las relaciones personales.
Pero como el objetivo es buscar siempre un pretexto nuevo para presionar al
hombre y hacerle sentir en culpa por ser varón, podemos confiar en que se
solicitará cada vez con más insistencia extender la definición de “maltrato” y “acoso”, hasta cubrir casi todos los comportamientos masculinos y
cualquier iniciativa del varón hacia la mujer.
Sin
embargo, en esta entrada quería comentar el tema específico de la violencia de
los padres contra los hijos, y en particular el canallesco tratamiento que da a
estas noticias la prensa basura, que no es la sensacionalista sino los grandes
diarios.
Decía
que hemos tenido hace poco la Semana del Odio Antimasculino y este año las
feministas han tenido suerte porque les ha venido en ayuda un trágico suceso,
un crimen atroz en el que un padre separado ha asesinado a sus dos hijos que
habían ido a hacerle una visita, concedida por el juez. Naturalmente al día
siguiente de dar la noticia aparecían artículos escandalizados que denunciaban
la concesión del régimen de visitas a los acusados de ”maltrato”, aprovechando los crímenes de unos pocos para castigar a
miles de padres, separarlos de sus hijos fabricando la emergencia de los “padres filicidas”, otra emergencia
inventada como la llamada “violencia de
género”.
Mostraré
tres artículos aparecidos en los tres principales diarios españoles, tres
ejemplos típicos de prensa no diré amarilla sino marrón – por motivos evidentes
– al servicio de la propaganda feminista:
La
sustancia de estas producciones de los juntaletras del feminismo es más o menos la misma, las líneas sobre las que se insiste siempre
las mismas, para trabajar la pasta humana de los cerebros como se amasa la
harina. Como tema común se lamenta que haya pocas denegaciones del régimen de
visitas, en general para los padres separados y en particular en los casos en
que hay denuncias por ”violencia de
género”.
El
objetivo de esta agitprop es
evidentemente aprovecharse de las atrocidades cometidas sobre sus hijos por unos
pocos desequilibrados o criminales, para obstaculizar aún más el contacto con
los hijos a la generalidad de los padres separados. Para negar las visitas
sobre la base de una denuncia por “violencia
de género” que como todo el mundo sabe la mayor parte de las veces es
falsa, porque la ley así lo fomenta deliberadamente y porque la mafia feminista
del maltrato saca su mordida con cada denuncia, con cada varón en la cárcel,
con cada familia deshecha y con cada curso de lavado de cerebro para “maltratadores”.
Sin
olvidarnos tampoco de que, entre las denuncias que no son falsas en un sentido
legal, la mayor parte son indecentes en
sentido moral (como corresponde a una ley indecente)
porque corresponden a “crímenes” como una discusión, un insulto, un empujón o
una bofetada.
Que
bien pudieran ser en muchos casos, además, la respuesta a una agresión de la
mujer o a comportamientos de ella que, si los hiciera el hombre, serían inmediatamente
calificados de “maltrato psigológico”. Pero
a ella todo le está permitido porque ella lo vale.
La
misma impunidad de la fémina, su arrogancia fomentada por el Estado y
multiplicada por la conciencia de ser intocable, le hace perder toda medida y
la lleva a un comportamiento de provocación continua, de guerra contra el varón
y de prepotencia intolerable que en realidad lo que hace es aumentar la violencia contra la mujer,
el rencor y la mala sangre en las relaciones con el hombre.
Todo
ello, naturalmente, no le preocupa a la mafia del maltrato. Al contrario, lo
que necesitan es que haya más violencia contra la mujer, más denuncias – verdaderas
o falsas o indecentes –, necesitan más asesinatos de niños y más crímenes
pasionales. Porque viven de ello.
El
nivel de indecencia de quien tan cochinamente manipula la realidad y las
víctimas infantiles, la densidad de excremento que se concentra en sus mentes,
son difíciles de expresar con palabras. La lengua española es rica en insultos
y mala leche general, pero ante esta gentuza se queda siempre corta.
Volviendo
a los artículos de agitprop en los diarios, además del tema principal
que es la peligrosidad de los hombres, asesinos de niños en potencia por haber
recibido una denuncia de maltrato, encontramos las líneas habituales de la propaganda
feminista. Como la mentira de que no hay prácticamente denuncias falsas, la
risible afirmación de que las mujeres no se aprovechan de la legislacion
hembrista, la histeria sobre la “lacra
social” de la violencia de género.
Los
juntaletras y los políticos se llenan la boca de superioridad moral afirmando
que los casos como el del filicida Bretón o el del que mató al bebé de su novia
son intolerables. Y no pongo en duda que lo sean, pero como los mismos
juntaletras y los mismos políticos no tienen nada que decir cuando una mujer
mata a sus hijos, evidentemente para ellos esos otros casos son tolerables. Sólo
son intolerables si es el padre el
asesino.
El
Gobiernillo Asturiano, en el caso de los dos niños asesinados por su padre,
expresa repulsa y condena, pero en realidad no por los niños en sí mismos sino
porque los ha matado el padre. Cuando los mata la madre no hay ni de lejos una
reacción así, es más normalmente no hay ninguna reacción en absoluto. Ni hay
manifestaciones de buenos ciudadanos ni minutos de silencio si los mata la
madre, ni es una lacra social ni se conmociona la sociedad.
Es
mejor que me calle, por educación, la opinión que me merecen estos indignados a
dirección única, estos virtuosos lagrimeantes que sienten en sus carnes el
crimen contra un niño sólo en ciertos casos y en otros no, estos meapilas de la
corrección política para los que algunos
niños son más iguales que otros. Lo que sí hay que hacer es indicarles por
dónde se pueden meter su indignación moral y sus buenos sentimientos.
Volviendo
a la manipulación y ocultación de la realidad, nos acercamos al meollo de la
cuestión cuando, en las producciones de los juntaletras, se denuncia el estereotipo de que los padres nunca dañarán
a sus hijos…y digo que es el meollo de la cuestión porque precisamente la percepción falsa de la realidad que es
aceptada sin discusión ni reflexión, es que las mujeres nunca dañarían a sus
hijos. Este es el verdadero estereotipo, en sentido negativo, que hay que
denunciar y combatir.
Pues
si nos preocupamos de profundizar un poco en la cuestion de los niños
asesinados en familia, en primer lugar nos llama la atención la carencia de
estadísticas y análisis fácilmente disponibles, la dificultad de entender cómo
están las cosas. Y es normal porque la verdad incómoda, de la cual se quiere
proteger a la población ocultándola, es que las
madres matan a sus hijos con más frecuencia que los padres.
Este
simple dato hace caer por su base toda la impostura de los padres separados o
denunciados como amenaza para sus hijos, derriba el castillo de mentiras y
falsificación construido por la mafia feminista, los juntaletras vendidos y los
machacanúmeros subvencionados para fabricar estudios basura de propaganda
hembrista, que juegan con las cifras para dar la impresión de que son los
padres separados quienes más matan a los hijos.
En
realidad todos los estudios serios muestran que la ausencia del PADRE biológico
es un grave factor de riesgo para niños y adolescentes. Si no está el PADRE los
menores tienen muchas más posibilidades de ser asesinados, maltratados, de caer
en drogas y delincuencia. En particular, las madres matan a sus hijos más que
los padres.
Doy
un enlace a este excelente artículo que tiene datos del 2010:
Resulta
precisamente, mira por dónde, que las muertes de niños aumentan con la
aplicación de políticas de género y con la separación de los niños de sus
PADRES. Y en particular, en los países nórdicos se maltrata y mata más a los
niños PORQUE SON DICTADURAS FEMINISTAS FEROCES en las cuales los hombres han
sido castrados mentalmente, el padre no cuenta nada y a la mínima ocasión se le
aparta de los hijos. Esencialmente estas sociedades son matriarcados basados en
la extorsión a gran escala, en los que
el Estado y la Madre son quienes crían a los hijos y dominan la sociedad,
obligando a la masa de esclavos masculinos a subvencionar el sistema.
Doy otro
enlace interesante en que se dan referencias y se muestra muy claramente el
verdadero rostro del maltrato a la infancia:
Una
referencia más sobre la cuestión particular de los niños de primera y de
segunda:
A
primera vista resulta difícil comprender cómo pueden las feministas sostener su
propaganda y hacer pasar la impostura de que los padres son quienes matan más a
los niños. Después de todo debemos asumir que es raro que se mienta explícitamente, que se den datos
falsos. Pero una lectura atenta de las anteriores referencias resuelve este
misterio. Sin mentir en un sentido técnico, los estudios de género, por
ejemplo, para contabilizar los casos de maltrato a la infancia no tienen en
cuenta todos los niños maltratados, analizando los datos en escuelas,
hospitales, etc. No. Esto se hacía antes. Ahora parten de las denuncias en los
juzgados de manera que sólo se ven los casos de menores maltratados o muertos
cuando el padre ha sido denunciado y ha caído en las garras de la mafia del
maltrato.
Así
es como las feministas hacen cuadrar las estadísticas. Aquí también hay menores
de primera y menores de segunda: los menores asesinados se cuentan sólo si la
madre figura en las estadísticas de violencia de género. Así es como los
machacanúmeros en nómina pueden presentar datos que, sin ser falsos en sentido estricto, le dan la vuelta a la realidad y mienten. Así es como
el Centro Reina Sofía puede decir en un informe que ha disminuido el
maltrato a la infancia, considerando los datos sólo desde el 2001, mientras que en realidad ha
aumentado respecto a los años anteriores, y de forma paralela a la aplicación
de las políticas de género, del alejamiento del PADRE de la casa y los hijos.
Considerado
todo lo anterior, como es evidente y en nombre del interés superior del menor,
es el padre biológico quien debería tener la custodia en la mayor parte de los
casos y la madre un régimen de visitas. Como se deberían hacer campañas a
dirección única contra la violencia materna (“cuando matas a tu hijo dejas de ser una mujer”… “tarjeta roja a la
madre maltratadora”… "si tu madre te da miedo llama al teléfono de ayuda" ... sin olvidar fotos de niños ahogados en la bañera,
tirados a la basura o con la cara destrozada).
¿Que
la mayor parte de las madres no son así? Tampoco somos violentos la mayor parte
de los hombres, ni pegamos a nuestras mujeres; sin embargo tenemos que soportar
la basura infecta de las campañas contra la violencia de género.
¿Que
hay también padres que matan a sus hijos? Sí, pero son más las madres, del
mismo modo que hay mujeres que matan a los hombres, pero como son menos las
campañas contra la violencia de género están dirigidas exclusivamente contra los varones.
Es
más, las campañas contra la violencia materna deberían ser mucho más intensas,
y este tipo de violencia considerada mucho más “lacra social” que la “violencia
machista” porque evidentemente una mujer adulta se puede defender y un niño
no.
Volviendo
por última vez a la prensa, todo lo anterior nos permite valorar en su justa
medida los artículos que regularmente aparecen sobre la violencia de género, el
nivel moral de los juntaletras y de la mafia que
tienen detrás de ellos, su desprecio por la verdad y la equidad más elemental.
En
breve, la gran prensa de la corrección política ha demostrado una vez más, en
este asunto como en muchos otros, que no vale ni para papel higiénico, porque
le dejaría a uno más sucio de lo que estaba antes. No sé si me explico.
5 comentarios:
Lástima no se pueda llevar a la masa estas verdades que expones, pero por lo menos luchas y lo intentas, no como la basura humana que tenemos por compatriotas en estos tiempos, gracias oso.
Concuerdo con que los nórdicos son matriarcales. Más aun con la fuerza que toma el neopaganismo.
Yo sostengo que PAGANISMO Y FEMINISMO SON UNO Y EL MISMO.
Esto explica porqué las de Femen suelen llevar una corona de flores en sus cabezas, como aquella fotografía de una feminista que sostenía el globo terráqueo entre sus piernas = simbolismo de la madre naturaleza = paganismo.
Buen artículo, desvelando otra realidad que la propaganda oficial(Incluida obviamente la feminista) trata de ocultar para seguir criminalizando a los hombres.
Viendo los estudios realizados en USA, o si se hubieran hecho en el Reino Unido creo que hubieran actuado igual, se pone de manifiesto, independientemente de los datos, la diferencia en democracia que nos llevan a España. La objetividad es impecable. Aquí están a años luz.
Pero yo quiero ir al fondo de la cuestión, y no es otro que la ley de violencia de genero aprobada por el " Enemigo del Varon " y su número 2 en 2004, porque es la base de todo. Si tomamos como referencia USA, nos encontramos con un caso, verdadero, el de la valenciana que está en prisión por secuestrar a su hija para que su padre no la viera.
En el fondo, la ley de violencia de genero de 2004 está hecha para practicar el secuestro masivo de los hijos al padre, vulnerando gravemente derechos fundamentales. Eso en USA está penado con cárcel. y aquí en España, el sr. Rodriguez Zapatero y la sra. De la Vega van tranquilamente por el país sin que les pase nada. Ven la diferencia ?.
Madre mata a sus 8 hijos, en Cairns, Australia...
http://www.hispantv.com/detail/2014/12/21/301909/nueva-tragedia-australia-madre-mata-8-hijos
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